
El gobierno español ha anunciado la retirada de unos 53.000 pisos turísticos del registro único de alquiler turístico y de temporada, que pasarán ahora a ser de alquiler permanente. Así lo anunció el presidente del ejecutivo Socialista, Pedro Sánchez, durante un acto de partido el domingo en Málaga.
El ministerio de Vivienda ya ha pedido a las plataformas de alojamiento turístico, como AirBnb y Booking.Com, que retiren los anuncios de estos alojamientos. El domingo, Airbnb emitió un comunicado asegurando que “este es un nuevo capítulo para Airbnb en España, definido por un compromiso proactivo con la colaboración, la calidad y una visión a largo plazo de crecimiento sostenible que beneficia a todos”.
Según la compañía, que ha protagonizado varios enfrentamientos con el gobierno español, unos 70.000 anuncios adicionales muestran ya un número de registro oficial, lo que eleva a la gran mayoría el porcentaje de alojamientos que cumplen con esta obligación.