
El ginecólogo del Grupo Médico Santa Paula (GMSP), doctor Daniel Márquez, señaló que “se estima que 50 % de las pacientes presenta dolor menstrual o dismenorrea y que una mujer promedio, durante su vida reproductiva, puede padecer de tres a cinco episodios de vulvovaginitis”. De manera que estos padecimientos “son dos de los motivos de consulta ginecológica más frecuentes”, enfatizó el especialista.
En el caso de la vaginitis o vulvovaginitis, el doctor explicó que se trata de una inflamación o infección de la vagina, que también puede afectar la vulva, y ocurre por un desequilibrio bacteriano, que puede ser generado por diversas causas, entre las cuales se incluyen: tomar antibióticos, usar un dispositivo intrauterino, aplicación de duchas vaginales, tener actividad sexual sin protección o con diversas parejas, tener cambios hormonales, presentar problemas inmunológicos, entre otros.
El doctor expresó que, generalmente, la inflamación vaginal no es asintomática, por lo que existen síntomas de alarma que indican que se debe acudir a consulta tales como: el aumento de la secreción vaginal, dolor durante las relaciones de pareja, cambios en el olor genital, irritación o picazón (prurito).
Ante la presencia de síntomas de vaginitis es fundamental acudir a consulta con un especialista, ya que se afecta la flora vaginal, disminuyen las defensas naturales del organismo, y esto aumenta el riesgo de padecer el virus de inmunodeficiencia humana (VIH) –que puede causar sida–, de acuerdo con el ginecólogo.
Márquez, explicó que la tasa de infección por VIH en mujeres que presentan una inflamación vaginal bacteriana es dos veces mayor que en las pacientes que no la tienen, según estudios realizados.
El doctor refirió que la vaginitis se diagnostica clínicamente, según los síntomas, y a través de la citología cervical (Papanicolau) o de cultivos vaginales específicos; mientras que el tratamiento depende del germen que genere el padecimiento, que puede ser una bacteria, hongo, virus o parásito.