UNT llama a la elaboración de políticas migratorias responsables y compasivas

La Dirigente por el estado Zulia, Lucrecia Morales en nombre del partido Un Nuevo Tiempo (UNT), condenó la actuación indiferente del personal de la Estación Migratoria de Ciudad Juárez, México, durante el incendio que dejó decenas de fallecidos de distintas nacionalidades, entre ellos varios venezolanos, para lo que solicitó investigación a fondo y se castiguen a los responsables con el peso de la ley  e hizo un llamado hacia la elaboración de políticas migratorias responsables y compasivas.

Así lo manifestó la dirigente zuliana en la sesión de la Comisión Delegada, celebrada este martes vía telemática, durante el debate sobre la tragedia ocurrida en México, donde murieron más de 40 migrantes de varias nacionalidades, entre ellos varios venezolanos.

“El llamado es hacia la elaboración de políticas migratorias responsables y compasivas, hacia esos seres que han tenido que seguir viviendo en México o en otras latitudes, quienes abandonaron su país y sus sueños”, destacó Morales.

Recordó que hasta la década de los 90 Venezuela fue un país receptor de flujos migratorios y da fe de ello porque es oriunda y reside en un estado fronterizo, pero lamenta que hoy en día, el país se ha convertido en una “nación expulsora de gente”.

Dijo que esto se evidencia de acuerdo a las cifras que manejan ACNUR y la Organización Internacional para las Migraciones, que recientemente revelaron que casi 7 millones de venezolanos han abandonado el país, de los cuales aproximadamente 6 millones han sido recibidos por América Latina y el Caribe, entre esos lugares de acogida se haya México.

Aseguró que muchos venezolanos fueron enviados de regreso a México mientras sus solicitudes de asilo eran procesadas a través del programa migratorio del expresidente estadounidense Donald Trump, “Quédate en México”, quienes han sufrido las consecuencias de las malas o ausentes políticas migratorias del estado mexicano.

“Nuestros paisanos han sufrido abusos de todo tipo y violencia, violaciones sexuales, secuestros, extorsiones por parte de policías corruptos, agentes migratorios y de grupos criminales mexicanos, incluso traumas psicológicos”.

Agregó que aparte no les es posible obtener documentos que legalicen su situación migratoria y tampoco pueden enviar a sus hijos al colegio u obtener asistencia médica, que es un derecho fundamental consagrado en todos los instrumentos internacionales.