
Un ecocardiograma transesofágico es un estudio diagnóstico de imágenes en tiempo real, que utiliza ondas de ultrasonido en 2D y 3D para generar una visión en movimiento del corazón.
El paciente debe ser evaluado en la consulta donde el cardiólogo decide cual estudio debe indicar. Generalmente se realiza primero un ecocardiograma transtorácico, en la unidad de Cardiología no invasiva, para obtener una visión general de la anatomía y hemodinamia del órgano. Posteriormente, de ser necesario, se procede a realizar el Ecocardiograma transesofágico en la unidad de Hemodinamia.
El médico cardiólogo, doctora Marlyn Peñalver, afirmó que “este estudio transesofágico tiene mayor resolución que el ecocardiograma transtorácico, por lo que se utiliza en aquellos casos en los que se necesita ver de forma más detallada, estructuras cardíacas”.
Las indicaciones de este estudio médico son múltiples:
Enfermedades de las válvulas del corazón
Trombos intracardíacos
Tumores cardíacos
Cardiopatías congénitas
Disección de la arteria Aorta
Infecciones de las válvulas o catéteres intracavitarios, entre otros.
La doctora Peñalver explicó que el Ecocardiograma Transesofágico se realiza con una sonda larga, muy parecida a un endoscopio, que se introduce a través de la cavidad oral hasta el esófago. La finalidad es ver el corazón desde distintos niveles del esófago y desde el estómago.
El estudio suele tener una duración aproximada de 30 minutos, dependiendo de lo que esté buscando el especialista en el paciente.
Para realizar el procedimiento, la persona a evaluar debe estar sedada: “Una sedación adecuada, para que el paciente no tenga una experiencia desagradable, sino que, por el contrario, se despierte como si nada hubiese pasado”, afirmó la doctora Peñalver.
La especialista agregó que la finalizar el examen el ecocardiografista revisa el estudio y remite la información al cardiólogo tratante, generando un informe con la información detallada. Dependiendo del resultado, se decide si debe ser evaluado por cirugía Cardiovascular.
Los pacientes con antecedentes de broncoespasmo deben ser tratados con mayor cautela en estos casos, y debe recomendarse a la persona que no ingiera alimentos entre seis y ocho horas antes del estudio y una hora y media tras el mismo.