
El interior de cataluñase ha convertido en el área de mayor preocupación, con acumulaciones que ya superan los 34 litros por metro cuadrado. La alerta naranja permanece activa en las provincias Tarragona y Barcelona, donde se esperan acumulaciones de más de 40 litros por metro cuadrado en tan solo una hora en el prelitoral y litoral. En la depresión central de Lleida, las precipitaciones superarán los 30 litros.
Las autoridades han activado avisos en los teléfonos móviles de los vecinos de Lleida, Tarragona y Barcelona, insistiendo en la necesidad de alejarse de rieras y barrancos, zonas especialmente peligrosas durante estos episodios. Varias universidades catalanas han suspendido sus clases como medida preventiva.
Además de las lluvias intensas, se esperan tormentas muy fuertes con probabilidad de granizo y rachas muy fuertes de viento, lo que incrementa el riesgo. El aviso de nivel naranja se mantiene vigente durante la madrugada mientras la banda tormentosa se desplaza a lo largo del litoral catalán.
Galicia enfrenta un temporal marítimo de alto riesgo que ha activado la alerta naranja en las provincias Coruña y Pontevedra. Los vientos alcanzarán velocidades de 50 a 61 km/h (fuerza 7), con rachas ocasionales de 62 a 74 km/h (fuerza 8) durante la madrugada.
Las olas llegarán a los 5 y 6 metros de altura, superando ocasionalmente los siete metros. En lugo, la alerta por mala mar es amarilla, con olas de hasta cinco metros.
