El papa León XIV reiteró su apoyo al matrimonio entre hombre y mujer como base fundamental de la sociedad y criticó la “libertad mal entendida” que permite decidir sobre la vida humana, incluyendo el aborto y la eutanasia. Las declaraciones fueron ofrecidas durante un encuentro con juristas en el Vaticano, en el que abordó los principales retos éticos y jurídicos de la actualidad.
El sumo pontífice advirtió sobre la tendencia a imponer “nuevos derechos” que, según dijo, desconocen la realidad natural del ser humano. Además, cuestionó las leyes que, en nombre de la autonomía individual, permiten atentar contra la vida desde su concepción hasta su final natural. Leon XIV pidió a los legisladores y profesionales del derecho que sean fieles a los principios fundamentales de la dignidad humana.
En su mensaje, también llamó a proteger la institución familiar y a garantizar que las leyes respondan a valores universales y no a modelos ideológicos cambiantes. El papa subrayó que la verdadera justicia no puede estar desvinculada de la verdad sobre el ser humano y su vocación al amor y la vida.